2011: Manual de conservar caminos por Paulo Coelho



1] Al principio del camino hay una encrucijada. Allí puedes pararte a pensar en la dirección que vas a tomar. Pero no te quedes demasiado tiempo, o nunca saldrás de ese lugar. Reflexiona lo necesario sobre las opciones que tienes delante, pero una vez que des el primer paso, olvídate definitivamente de la encrucijada, pues en caso contrario nunca dejarás de torturarte con la inútil pregunta: "¿El camino que elegí era el correcto?"

2] El camino no dura para siempre. Es una bendición recorrerlo durante algún tiempo, pero un día terminará, y por eso debes estar siempre listo para despedirte en cualquier punto. Por mucho que te deslumbren determinados paisajes, o te asusten ciertos trechos donde hay que esforzarse especialmente para seguir en pie, no te aferres a nada. Ni a los momentos de euforia, ni a los interminables días en los que todo parece difícil, y el progreso es lento. Más tarde o más temprano llegará un ángel, y tu jornada habrá llegado a su término. No lo olvides.

3] Honra tu camino. Fue tu elección, fue decisión tuya, y en la misma medida en que tú respetas el suelo que pisas, este mismo suelo respetará tus pies. Haz siempre lo más adecuado para conservar y mantener tu camino, y él hará lo mismo por ti.

4] Equípate bien. Lleva un rastrillo, una pala, una navaja. Entiende que para las hojas secas las navajas son inútiles, y que para las hierbas muy enraizadas los rastrillos son inútiles. Conoce siempre qué herramienta hay que emplear en cada momento. Y cuida de ellas, porque son tus mayores aliadas.

5] El camino va hacia delante y hacia atrás. A veces es necesario volver porque se perdió algo, o porque un mensaje que debía haber sido entregado se quedó olvidado en un bolsillo. Un camino bien cuidado permite que puedas volver atrás sin grandes problemas.

6] Cuida del camino antes de cuidar de lo que está a su alrededor: atención y concentración son fundamentales. No dejes que las hojas secas del borde del camino te distraigan, ni que la manera como los otros cuida sus propios caminos desvíe tu atención. Usa la energía para cuidar y conservar el suelo que recibe tus pasos.

7] Ten paciencia. A veces es necesario repetir las mismas tareas, como arrancar las malas hierbas o cubrir los agujeros que surgieron tras una lluvia inesperada. Que esto no te enfurezca, pues forma parte del viaje. A pesar del cansancio, y a pesar de las tareas repetitivas, ten paciencia.

8] Los caminos se cruzan: las personas pueden explicar el tiempo que hace. Escucha los consejos, pero toma después tus propias decisiones. Tú eres el único responsable del camino que te fue confiado.

9] La naturaleza sigue sus propias reglas: por lo tanto, tienes que estar preparado para los súbitos cambios del otoño, para el hielo resbaladizo del invierno, para las tentaciones de las flores en primavera, y para la sed y las lluvias del verano. En cada estación, aprovecha lo mejor que te ofrezca, y no te quejes de sus particularidades.

10] Haz de tu camino un espejo de ti mismo: no te dejes influir en absoluto por la manera como los demás cuidan de sus caminos. Tú tienes un alma que escuchar, y los pájaros transmitirán lo que tu alma quiere decir. Que tus historias sean bellas y agraden a todo lo que tienes en torno. Sobre todo, que las historias que cuente tu alma durante la jornada se reflejen en cada segundo del recorrido.

11] Ama tu camino: sin este principio, nada tiene sentido.

Poderosas Leyes Universales



El Principio del Amor: Dice AMA A LOS OTROS COMO A TI MISMO, las demás leyes son derivadas de esta y se aplica a todas nuestras actividades.

El Principio de Causa y Efecto: En el Universo, todo lo que pasa ha sido provocado por una causa o un conjunto de causas. Todo ocurre por una razón.

El Principio de la Mente: Todos los pensamientos pueden materializarse. Somos lo que pensamos.

El Principio de la Equivalencia: Mental dice que para manifestar un deseo lo tenemos que visualizar vívidamente, tener una imagen clarísima de lo que queremos.

El Principio de Correspondencia: Dice que como es arriba es abajo y como es adentro es afuera. De acuerdo sea tu vida y a las cosas que te sucedan así eres por dentro realmente.

El Principio de la Creencia: Todas nuestras verdaderas creencias incluso miedos se transforman en nuestra realidad. Nos ocurre aquello que creemos.

El Principio de los Valores: Los valores y creencias de una persona se reflejan en sus acciones.

El Principio de la Motivación: Todo o que hacemos está motivado por nuestros deseos, necesidades e instintos.

El Principio del Subconsciente: El subconsciente nos alerta sobre las cosa que nos rodean de acuerdo a nuestras creencias y temores.

El Principio de la Expectación: Dice que lo que esperamos que suceda con absoluta confianza, llega a materializarse.

El Principio de la Concentración: Aquello que lo que enfocamos nuestra atención con más frecuencia pasa a formar parte de nuestra vida interior.

El Principio del Hábito: Las cosas que hacemos automáticamente forman parte de hábitos y aquellos que nos alejan de nuestros objetivos deben ser eliminados.

El Principio de Atracción: Somos como imanes que atraemos, la gente circunstancias, acontecimientos y cosas que armonizan con nuestros pensamientos dominantes.

El Principio de Elección: Somos libres de elegir nuestros pensamientos por consiguiente de experimentar lo que elijamos en nuestra vida.

El Principio de Optimismo: Una actitud positiva facilita el éxito y la felicidad. Te mantiene en sintonía con la parte positiva con del Universo.

El Principio del Cambio: Todo está en constante movimiento y el movimiento es vida. Lo estático o estancado es equivalente a la muerte. Así que es importante dejarse llevar por la vida y aprovechar los cambio es en vez de ser víctima de ellos.

El Principio de Responsabilidad: Somos totalmente responsables de todo lo que tenemos en la vida, lo que recibimos y todo lo que alcanzamos.

El Principio de Compensación: Todo lo que enviamos o damos lo recibimos multiplicado de vuelta. Siempre seremos “compensados” por todo lo que demos.

El Principio de Servicio: Todo lo que recibamos está en directa proporción a lo que damos y a los servicios que demos. Servir es la clave.

La Ley de mayor Compensación: Siempre debemos dar más de lo queremos recibir o más bien, si es posible, desinteresadamente. Es decir dar antes de recibir.

El Principio de la Creatividad: Todo adelanto en nuestra evolución parte de una idea. Toda idea que tengamos que creamos que es posible podemos manifestarla materialmente.

La Ley de la Flexibilidad: Es más fácil lograr nuestra metas cuando somos flexible en el modo de conseguirlas. El ser inflexible nos puede hacer perder buenas oportunidades.

La ley de la Persistencia: La habilidad para mantenerse en el objetivo a pesar de las caídas y las decepciones afirma el carácter y es una condición esencial del éxito.